A la avenida de Oza hay que saber domarla. También a los habitantes de Os Castros, que son muy suyos. Está por ahí un Pizza Tutto ya legendario (el segundo en existir, os recomendamos leer el origen de la empresa) que puso a todos los coruñeses a comer pizza con spaghetti y también está la increíble tasca Los Peores Vinos (aquí el tuitero Uxío se hace eco y en las respuestas cuentan su historia) que esperamos abra para poder ver si es cierto lo que prometen. Pero hay otro sitio, largo como él solo, que se erige en sheriff de esta empinada avenida. Sí, hace gala de donde se ubica. Es la Cervecería Los Castros.
Y tiene tortilla y claro, allá donde hay tortilla estamos nosotros. Sobre todo porque en nada llega junio y entramos en un veranito que nos tiene que coger con fuerzas: el playoff (crucemos dedos) del Depor, un San Juan un poco ya en condiciones, conciertos en el estadio de Riazor tras 19 años, luego las fiestas de María Pita y esa tarde del verano que hace sol y podemos ir a la playa. Algo habrá que festejar, ¿no? ¿Vosotrxs ya estáis haciendo planes para lo que se viene?
Nosotros alguna que otra cosa ya estamos organizando pero nuestro plan fundamental va a ser patear Coruña encontrando esas tortillas escondidas que nos quedan por catar. Y es que cada vez hay menos que se nos escapen pero seguro que tenemos pendientes por descubrir verdaderos tesoros que revolucionen nuestro TOP10. Y por si fuera poco seguimos recibiendo vuestras críticas para el Concurso de Crítica Tortillera. Si eres universitario y aún no has participado, échale un ojo que te puede interesar. Y ahora, al lío.
Aspecto: Amarillo rabioso, se ve ya la patata grande y la mezcla que ha llegado al cuaje completo.
Jugosidad: Se parte fácil y no podemos decir que sea taruguera. Al contrario, para ese nivel de estar hecha es bastante jugosa, sin alardes tampoco.
Sabor: De acuerdo, sabemos que las tortillas que cogemos a horarios intempestivos se lucen menos pero es lo que toca. La tortilla no está mal pero tiene algún deje raro, por trozos, que no sabemos identificar. Quizás algo del aceite. Cuando no nos chirrían esos regustos extraños tenemos una tortilla con un huevo muy sabroso, una patata presente y un conjunto quizás algo saladito para paladares sensibles. Pena de esos toques que desmerecen un poco la experiencia y de la temperatura, que ya no guarda calor en su interior.
Tamaño: Generoso pero se hace grande por su consistencia.
Precio: 2.10€
Otras observaciones: Una terraza kilométrica que cuesta llenar. Un buen servicio, pan como para una boda y pinchito de queso y salchichón.
Y el veredicto es…
Nota final: Sensaciones agridulces. Una tortilla a la que se le nota la vejez y algún que otro sabor inindentificable, lo cual tiende a disgustar. De precio tampoco es económica y de jugosidad, a pesar de huir de la taruguez, tampoco permite mojar el plato. Al final la tortilla de la Cervecería Os Castros va sumando pegas y acaba por hacer que suspenda. La puntilla se la ha puesto el superar los 2€, que ha hecho que no pase el umbral del aprobado y se quede con un 4,7/10.
Lo mejor: La hemos cogido en horas bajas, tenemos ganas de volver y probarla recién hecha e igual suma puntos.
Lo peor: Por supuesto, esos regustos. Mientras no desvelamos el misterio le echamos la culpa, como os dijimos, al aceite.
Y tú… ¿has probado esta tortilla? ¿qué te ha parecido? ¡Vota aquí!
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La Cervecería Los Castros está en la avenida de Oza en el número 124
Una pena que no hayáis catado la famosa tortilla de curra del puntal, mítico local de los castros desaparecí hace 1 año. La mejor tortilla sin ninguna duda.