¡Abran las jaulas! Volvieron los bares y con ellos el tortilleo tradicional, el de sentarse en la mesa y degustar una tapa de tortilla humeante con un café o refresco. Tradicional, tradicional del todo no es, que aún tenemos que llevar la mascarilla para tomarla, pero al menos estamos más cerca de reencontrarnos con la manera de tapear que teníamos en el que ya parece lejanísimo año 2019. Y aunque este sea un año que seguro no querremos recordar, nosotros entramos en la recta final de diciembre recordando alguna que otra tortilla que probamos hace meses. Hoy toca la del Marisma.
Marisma es una cafetería de lo más típica situada en el barrio de los Mallos, en plena Ronda de Outeiro, más o menos a la altura de un templo tortillero que sabemos os vuelve locos como es el Andy. Porque aunque parezcan las «hermanas pequeñas» del mundo tortillero, las cafeterías son sitios donde se pueden encontrar muy buenos especímenes de este plato. Sí, ya sabemos que quizás no encontraremos tortillas betanceiras de 24 huevos, que muchas veces tienden a hacerlas cuajadas de más para poder ponerlas como pincho o incluso dentro de un bocadillo para llevar… pero también muchas veces la persona al mando de la sartén en la cocina tiene una mano especial para el plato y una cafetería normal que apenas parece que pone cafés y algún sandwich esconde un tesoro tortillero que solo conocen los habituales. En nuestro TOP10 hay algún que otro ejemplo.
Y una cosa más os diremos: en estos tiempos en que toda precaución es poca y esas sobremesas de 3 horas no parecen la mejor idea a la hora de reducir riesgos, las cafeterías suponen una excusa perfecta para ir a matar el gusanillo tortillero sin necesidad de darse un festín. Un café y una tapa a media mañana, aunque sea solos y sin tardar mucho tiempo, nos parece una forma excelente de arrancar el día.
Aspecto: Clasicaza, de piel gruesa y de piel vieja. Mangallona cual chaval robusto.
Jugosidad: No por estar bien cargada deja de ser jugosa. Bien logrado el punto que consigue dejar un pequeño mojeteo.
Sabor: Tiene dejes cebolleros, quizás de la sartén donde se cuajó. De consistencia potente, la patata gruesa no está demasiado hecha y el huevo es sabroso. Buena mezcla. Maneja bien su edad.
Tamaño: Por la consistencia que ya hemos comentado, sacia.
Precio: Entre 1.80 y 2.00.
Otras observaciones: Al parecer la tienen tambien con cebolla. La ruidosa terraza en la Ronda de Outeiro tiene la suerte de estar cubierta. Nos ofrecieron también darle un toque de calor. Buen servicio y pan bastante decente.
Y el veredicto es…
Nota final: Nos gusta la tortilla del Marisma. Quizás algo cara pero saciante, sabrosa y sin defectos a la vista. Es lo que le pedimos a las cafeterías: que cumplan con su cometido, aunque no vayan a ganar un premio. Salimos con la tripa contenta de este local y dejamos un nuevo 7.1/10 en los Mallos.
Lo mejor: Alimenta.
Lo peor: Algo mas económica hubiese ganado puntos pero en esta vida todo acaba por subir de precio.
Y tú… ¿has probado esta tortilla? ¿qué te ha parecido? ¡Vota aquí!
Marisma está en la Ronda de Outeiro en el número 130