La nueva estación

La siguiente entrada fue escrita hace más de cinco años así que es probable que esté desactualizada.

Es ley de vida que los bares vayan cerrando y otros les sucedan. A nosotros, dentro de esa normalidad, nos tiene la cabeza loca. Intentamos en la medida de lo posible que la página esté actualizada pero a veces no sabemos ya cuantos de los más de doscientos sitios a los que hemos ido han cerrado sus puertas, han cambiado de dueños, han mejorado o empeorado sus tortillas… Es por eso que agradecemos vuestro feedback y avisos para decirnos si algo en la página ya no es como era. Así fue que nos avisaron de que el antiguo Argo de al lado del Muncyt había dejado paso a un nuevo local llamado La nueva estación. 

Y claro, en este verano loco en el que andamos sufriendo temperaturas de 35 grados en la ciudad (lo nunca visto), es difícil decirle que no a un bar con terraza y tortilla frente al mar. Y es que ya os lo dijimos más veces: el camino del Playa Club al Obelisco Millenium, además de ser un paseo tranquilo (y más si se continua hasta O Portiño) está lleno de tortillas de aúpa, y no solo la de nuestro querido Cabanas.

Con estos precedentes y con ganas de pasar una tarde chill nos acercamos por la zona, como no, tras pegarnos unos largos en la playa de Riazor que cuando el calor aprieta ni aires acondicionados ni leches: agua fría y a correr. Y cuando es el hambre el que aprieta: tortilla, claro, qué va a ser esto.

Aspecto: Añejísimo, carracuco, tortillo viejo. Eso y el color amarillo naranja nos dejaron bastante descolocados.
Jugosidad: Pues esa piel marchita no escondía nada bueno detrás de las arrugas. Tortilla raspucia y quedosa en boca, si el pan no tuviera la misma edad que el que suscribe quizás hubiese ayudado a bajarla. El agua sirvió.
Sabor: La consistencia es algo plastilinosa pero siendo una tortilla rara, casi lo mejor que se puede decir es que de sabor no estaba mal. Lo único salvable.
Tamaño: Brevísimo, un suspiro.
Precio: 2€ que parecen una broma.
Otras observaciones: El sitio estaba a tope, claro. El pan fue un corte más que breve que agradecimos por lo malo que era, el tenedor era de juguete y el servicio nos fue bastante lamentable, entre tardanzas extremas y equívocos. No encontramos la carta de tapas pero al parecer solo tenian tortilla. Como única nota positiva pusieron de pincho unas bolitas de bacalao bastante aceptables.

Y el veredicto es…

Nota final: No todo cambio es a mejor y si ya el Argo no tenía una tortilla de aprobado, La nueva estación aún lo hace peor. Una tortilla que pese a tener un sabor pasable suspende estrepitosamente en todos los demás apartados y se queda con un 3.5/10, eso sí, mirando al mar.
Lo mejor: Lo salvable mejor dicho: que no sabe mal.
Lo peor: Pues tenemos toda una amalgama de características para decidir pero la que nos toca especialmente los cataplines es que una tortilla tan cutre valga dos euros. Menuda jeta.

Y tú… ¿has probado esta tortilla? ¿qué te ha parecido? ¡Vota aquí!
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La nueva estación está en la Avenida de Labañou en el número 2

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