Hay sitios en los que no te juntas con tus amigos para celebrar un ascenso precisamente. Incluso en los que se va sin hambre y cuesta aún más que baje la comida y no por poco jugosa. Hay veces que se come hasta con un café medio bebido. Todos estamos de acuerdo: no solemos ir a los tanatorios a meternos una enchenta. Pero desgraciadamente, uno acaba pasando por ellos, cuando no es por uno propio es por un cercano y a veces las horas se alargan y alargan y al final hay que ir metiendo algo al buche que las fuerzas son bien necesarias. ¡Hasta en los peores momentos! ¡Hay que seguir en pie!
En el tanatorio de Servisa de A Coruña, ese que tiene una cuestita NADA PRONUNCIADA para entrar, hay también una cafetería para que la gente vaya a reponer fuerzas o meterle algo al estómago para aguantar las horas venideras. Y el equipo de Aún Pillas Tortillas, como todo hijo de vecino, también pasó por allí. Y en ese momento aciago decidieron pedir esta noble tapa para intentar paliar el hambre. ¿Tendremos que volver a quejarnos de un mal tortillamen en un sitio tan necesario?
Aspecto: La tanatoestética no ha hecho milagros con esa tortilla. El borde ese frito que se intuye y el aspecto de tarugón (con los dos colmillos de la foto) no auguran que vaya a haber que ponerle flores.
Jugosidad: Lo tiene todo. Reborde fritito, crujicorteza, se puede seccionar en trozos volumétricos y cuesta Dios y ayuda que baje por la garganta. Señores, el juez puede levantar acta: nos hallamos ante un TARUGUIS TARUGUM de manual. ¡A diseccionar!
Sabor: Seco fuera, seco dentro. Sabor regulero. No descartamos que sea comprada hecha (¡horreur!)
Tamaño: Justito, nada del otro mundo.
Precio: Nos sumamos a la moda de la estafa. Casi me desmayo al ver que costaba la tapa 1.90€ eurazos.
Otras observaciones: Pocas opciones para comer, servicio normal y un ambiente que no es precisamente un cotillón de fin de año, claro.
Y el veredicto es…
Nota final: Esta tortilla podía estar de muerte pero nos salió un tanto fúnebre. Se lleva nuestro pésame y un 3.7/10. Tanta paz lleves como aquí dejas.
Lo mejor: Se puede comer.
Lo peor: Clásica tortilla estafa: cara y sin valer un can. Y encima tampoco hay demasiada opción. Pues na.
Y tú… ¿has probado esta tortilla? ¿qué te ha parecido? ¡Vota aquí!
El tanatorio Servisa está en la Avenida Pasaje, s/n.