Cafetería Switzerland

No serán muchos los que, con las medidas que hay, escogerán tomar el avión para sus vacaciones este verano. Toca disfrutar de Coruña con sentidiño o hacer alguna escapada cerca por si nos vuelven a cerrar. Nosotros, posponiendo conocer Europa para otro verano, nos conformamos con ir a catar la tortilla de la Cafetería Switzerland.

La Switzerland está en un enclave particular. En la desembocadura de la Calle México (que aún conserva un letrero de calle tradicional) en Alcalde Pérez Ardá, seguro que muchos que han salido del caos de Cuatro Caminos conocen este sitio con una terraza en la orilla del carril bici. También lo conocerán los habituales de la zona pues no es raro que registre buena entrada a la hora del desayuno / tentempié del mediodía. Nosotros, que cada vez nos ataca antes el hambre, nos apuntamos a este turno.

Buenas medidas de seguridad de distancia y limpieza y una comoda terraza que, si te descuidas te pega una solana que te deja regular son otras de las señas de este sitio. Y un soplo misterioso (como siempre son los vuestros) que nos decía: ahí hay cosa fina en cuanto al tortilleo.

Aspecto: Brillante, tono amarillo chillón, una tortilla de portada de revista. No escatima entamaño y deja pequeño al plato e incluso desparrama su interior para aclararnos ya antes de nada que no estamo ante un tarugo. Enamoramiento a primera vista.
Jugosidad: Se lleva todos los puntos de jugosidad esta tortilla que desparrama en plato y no se aguanta unida. Se podría cortar con un palillo.
Sabor: Lo de tenerla debería ser trampa. Patata muy rica, un huevo a la altura. De maneras delicadas pero con cierta presencia. Se mueve bien en boca, la consistencia es heterogénea y la sal es justita. Típica tortilla casera que podría hacer un familiar especialmente mañoso. Quizás echemos de menos un punch final de sabor (no deja de saber suave) pero qué más vamos a pedirle.
Tamaño: Grande, amplio.
Precio: 2 euritos merecidos que lamentamos cada vez ver en más bares.
Otras observaciones: Servicio excelente y dedicado. Posibles pinchos. Pan correcto pero justo en tamaño.

Y el veredicto es…

Nota final: La del Switzerland es una muy buena tortilla, poco podemos achacarle si nos la plantean así. Nos gustaría saber si aguanta bien las horas o si todas salen tan bien, pero juzgamos lo que comemos y esta vez se lleva un 8,4/10
Lo mejor: Jugosidad y tamaño.
Lo peor: Cada vez vemos más estándar el precio de dos euros por una tortilla. Aunque aquí son dos euros merecidos (y la tortilla da trabajo), podemos decir que es su punto flaco.

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