Seguimos abriendo el 2014 a golpe de tapa, esta vez con una tortilla sobre ruedas. No creemos que ninguna cafetería de estación vaya a ganar jamás una estrella Michelín, pero como Jesucristo, las tapas de tortilla son ubicuas y allá donde haya una en un plato esperando a ser comida, estaremos deseosos de probarla. La Estación de Autobuses de A Coruña no es tampoco un sitio donde celebraría un banquete de una comunión.
Ya sabéis como son las estaciones de buses. Normalmente, jodidas. Sin embargo esta tiene una cafetería amplia con una carta con mucha oferta y algo que nos maravilló desde que entramos: unos precios asequibles. Pese a esto fuimos a desayunar en los estertores del 2013 una tortillita sin mucha fe pero con una chispa de esperanza latente.
Aspecto: Raro, inquietante. Traía como una capita de blanco y de tostado que no supimos si preguntar a que venía o tratar de darle la vuelta para no tener que verla. Nada grave de todas formas.
Jugosidad: Ni fú ni fá. Gramadita, granosita. Se dejaba comer muy tranquilamente aunque le venía bien un líquido para bajar. No estaba seca, estaba como de medio horneado. La pedimos a las 10:30 de la mañana así que no nos explicamos muy bien si era de ese día o del anterior. Esta tortilla era digna de Cuarto Milenio.
Sabor: Ahora llega la primera nota sorprendente… estaba BIEN BUENA. A pesar de que la temperatura interna era como mucho tibia, la jugosidad era algo arenosa y el aspecto era sospechoso, la verdad es que estaba bien rica y nos la comimos en un santiamén.
Tamaño: Potente, cumple con creces, quita el hambre y sacia sin agotar.
Precio: La segunda sorpresa. Acostumbrados a que te cobren cuatro euros y medio por un bocadillo de cartón en la estación de buses de Motilla del Palancar, no nos esperábamos que por una tortilla decente nos cobrasen tan solo 1.20€. Bien por ellos.
Otras observaciones: Pan fresquito, servicio excelente y una carta en la que el resto de cosas también tenían un precio económico. No preguntaremos por las dudas metafísicas que nos causó la tapa.
Y el veredicto es:
Nota final: Si no fuesemos exquisitos reduciríamos una tapa a sabor, precio y tamaño. En estas tres triunfa bastante. Le vamos a cascar un 6.4/10 porque ella lo vale.
Lo mejor: Sabrosa y barata. Puede salvar la vida de muchos viajeros hambrientos.
Lo peor: Nunca sabremos de donde ha salido ni hacia donde irá. Como los autobuses.
Estación de Autobuses está en la calle Caballeros número 21.
Actualización 04/12/17: Otros planes existen ahora para la Estación de Autobuses, que se quedó sin cafetería desde hace tiempo. Esperemos que los viajeros puedan aguantar un poco la gula, lo suficiente para encontrar otra tortilla en el barrio.
Achanta! Pero si la tortilla de la estación es una ful! 6,4 oíste? Pero si la del Pato Mareado le pusisteis un 4 y está mucho mejor!
Menuda mierda.