Cafetería Las Cadenas

Aquí estamos, vuestros hinchas no fallamos. Quizás os sorprenda vernos publicar de nuevo una crítica tortillera (¿cuándo se han escapado para tapear estos?) pero os desvelaremos el truco antes de empezar. La tortilla de hoy la catamos hace meses, cuando todo esto del confinamiento era una palabra que desconocíamos. Esta última tortilla que nos quedaba en la recámara es de un sitio que, entonamos el mea culpa, también teníamos algo confinado. Y es que hoy, para llevaros de viaje a lo que era desayunar en un bar, nos vamos hasta Eirís y su Cafetería Las Cadenas.

No podemos evitar mirar con cierta envidia a los habitantes de Eirís. Al menos, si navegamos por la zona en Google Maps, se ven desde el cielo leiras y jardines donde bien seguro más de uno estará pasando las horas o aprovechando los escasos rayos de sol. ¿Qué dirán ahora los que tienen su pisazo por el centro? Mira que si se revalorizan los pisos y casas de las afueras, a más de uno le va a dar una alegría…

Nosotros ni jardín ni pisazo, si acaso alguno una pequeña terraza desde la que mirar las palomas. Sin embargo, lo que sí tenemos es hambre y eso nos ha llevado a una nueva forma de distraer el encierro. Estamos haciendo una lista de todos los locales que vamos a visitar en cuanto podamos salir a la calle y vuelvan a abrir. Imaginamos que habrá que ir con calma pero no nos detendremos hasta tachar la lista entera. Y no os creáis que son todos de tortilla: caerá seguro un pulpito en el Fiuza (o en la Pulpeira de Melide de Lola), un cocido en Casa Saqués, una churrascada en La Nueva Estancia o un lomo alto en el Charrúa, unos tacos en el Tamarindo, unas hamburguesas en la Granja de Klaus, ir a buscar una tortilla (¡ahora sí!) bien grande para llevar a O Roncudo, unas cañas en El Cubo, unos churritos en El Timón, ponernos finos de tapas a 1€ en La Bombilla / el Vita-K Galera (¿no tiene un nombre un poco malsonante ahora que lo vemos?), bocadillos de jamón en La Leonesa, que nos den lo que quieran en el Artabria pero que no se olviden en el Pizza Tutto de traernos una Salvatore familiar (si no estoupamos ya con el pollo con almendras del Chinatown). Qué, ¿os entró el hambre? Pues ya tardáis en hacer vuestra propia lista para todo lo que tenéis ganas de comer y de paso contarnoslo a ver si sacamos nosotros ideas. Por lo pronto os dejamos con la crítica de la tortilla de Las Cadenas.

Aspecto: No parece especialemente grande. Tiene un color bonito, con motas morenitas. Se ve sabrosa a primera vista pero no parece que vaya a dejar hundir el pan en el huevo.
Jugosidad: Y sin dejar mojar pan y con un deje muy levemente pegajoso, baja sola por la garganta. Un huevo cocinado en su justo punto tiene la culpa.
Sabor: Delicada de sabor pero riconuda (habríamos aceptado también deliciosa). La patata bien blandita, aporta algo de consistencia a una mezcla que pese a todo se deshace con facilidad. Un punto de sal no excesivo (quizás nos hubiera gustado algo más) pero se nota cariño en la elaboración y sobre todo que quien la hace, sabe lo que se hace. Temperatura adecuada, una corteza más hecha que sirve para diferenciarse del exterior y huevo de calidad.
Tamaño: Nada exagerado pero aceptable.
Precio: Calculamos 1.50€ pero incluso podría ser menos. ¿Alguien nos ayuda?
Otras observaciones: Tienen tortilla normal, con cebolla, con chorizo y otras tapas suculentas que no venía a cuento tomar a la hora del desayuno pero que cataremos seguro otro día (sobre todo la lasaña que humeaba en la mesa de al lado) que nos pasemos por ahí. El servicio excelente. El panazo era de la parte del currusco pero generoso.

Y el veredicto es…

Nota final: Es cierto que el trono de Eirís de momento está fácil, pero esta tortilla se corona sin lugar a dudas como la mejor que tomar por aquellos lares. Un sitio entrañable, con buen servicio y buenas tapas. Creo que vamos a añadir un desayuno en Las Cadenas a la lista que os pusimos antes. De momento le dejamos nuestros mejores deseos (al igual que a vosotrxs) y un 7,9/10.
Lo mejor: Se nota cuando un sitio es de barrio. Muy buen servicio, muy buen precio y buenos ingredientes para complacer al cliente.
Lo peor: Varios detalles pequeños que tienen que ver con nuestro gusto personal. Un poquito más de sal, un poquito menos de cuaje, un poquito más grande… Somos un poco tiquisquimis.

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La Cafetería Las Cadenas está en la Avenida de Monelos en el número 215 bajo

Actualización 26/01/24: Nos avisan en comentarios que la más que sabrosa tortilla de Las Cadenas… ¡se ha jubilado! Bueno, ella no, sus dueños, a los que, aunque echaremos de menos, les deseamos una feliz jubilación y que descansen, que lo merecen.