La Caseta de Aurora

¿Es La Caseta de Aurora el local de moda? Pues la verdad no lo sabemos, pero la apuesta de enchufar una pulpeira en pleno Vioño donde caben ciento y la madre parece suficientemente ambiciosa para que estén intentando conseguirlo. Nosotros, pendientes de la rabiosa actualidad tortillera, nos presentamos allí al toque.

Por Os Mallos están las cosas algo caldeadas ultimamente pero Vioño parece que sigue su propio rumbo. Alquileres sobrepreciados, zonas verdes de esparcimiento, amplias aceras y hasta un carril bici hacen que parezca que la Avenida de Arteixo separa algo más que dos manzanas. Bueno, en lo relativo a los alquileres sobrepreciados en ambos lados cuecen habas pero en Vioño los pisos al menos tienen ascensor. En lo que compiten también es en bares y restaurantes pero por mucho que nos guste La Masía, mucho tiene que madrugar Vioño para superar décadas de raciones y raciones cocinadas en los fogones de su barrio vecino.

Cuando vimos la noticia de la apertura de La Caseta de Aurora no vamos a negar que nos invadió cierta desconfianza. Ese intento de vender como algo casero, casi familiar, 100% tradicional según dicen pero que en realidad tiene detrás a un grupo empresarial que lo mismo te vende sushi que pizzas… En fin, times are a’ changin o no tanto porque la esta jugada tiene más años que un bosque. Pero basta de prejuicios: allí nos plantamos atraidos por esa oferta de tortilla betanceira y dispuestos a salir bien comidos.

Aspecto: Bonita, amarilla, sin mucho más que decir.
Jugosidad: Interior medianamente jugoso, pegajoso más bien, de pasear la lengua entre los dientes y arramplar con los restos palueguiles. Luce más a la vista que al sabor. Desde luego llamarle «betanceira» es un tanto exagerado. Han intentado buscar el punto medio que puede contentar a surfistas del huevo y cuajaders.
Sabor: Aunque no la tiene, como reza la tradición, se le puede intuir un aire de cebolla. Sabor acertado, sin fallos grandes aunque no sabemos si por calidad, ingredientes o por la forma de prepararla en la cocina no nos parece una tortilla gourmet. Sale del paso airosa pero no nos acordaremos de ella tras unas semanas.
Tamaño: Aceptable también.
Precio: 12.50€, que podrían ser menos.
Otras observaciones: La experiencia fue cuanto menos curiosa. Fuimos a cenar un lunes de noche y a pesar de lo unusual de la fecha aún habia unas cuantas mesas ocupadas. La comida nos la trajeron rapidísimo, en menos de 5 minutos tras pedirla, y en general tanto el servicio como el pan fueron bastante buenos.

Y el veredicto es…

Nota final: Podría haber sido peor pero la verdad es que la tortilla de Aurora de Vioño se deja comer. Eso sí, no esperéis ninguna maravilla. Es una tortilla pasable, sin errores grandes, al igual que el resto de platos de la carta. Los precios están ligeramente por encima de lo que deberían pero si os gustan las franquicias, no complicaros mucho y un servicio veloz puede ser este un buen local para comer. Le damos un 6,3/10 y la dejamos para centrarnos en otras «100% tradicionales» de verdad.
Lo mejor: Íbamos con miedo y la verdad es que no salimos decepcionados del todo. Se deja comer y no es demasiado cara.
Lo peor: No destaca por nada, no nos ha emocionado y tampoco es betanceira. El modelo de negocio creemos que implica que la tienen a medio hacer y la cuajan en el momento.

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La Caseta de Aurora está en la calle Igualdad en el número 1.
Actualización 21/03/24: Un enviado a la zona nos informa que la experiencia La Caseta de Aurora ha acabado en Vioño y el local ha dejado paso a una sucursal de la Taberna da Penela. Parece que existe cierta continuidad en eso de dar tortillas, por allí iremos a ver qué tal se da.

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